Camiones que no salen, empresas de colectivos que pusieron en marcha diagramas de emergencia, firmas al borde de la paralización y cargas de combustibles pedidas con anticipación, son las consecuencias que ayer mostraba la falta de combustibles, en este caso de gasoil, en la región.
El panorama es muy complicado y las empresas que aún tenían la posibilidad de poner sus vehículos en marcha, anticiparon que a lo sumo podrían hacerlo una semana más.
En algunos supermercados dejaron de recibir azúcar y aceite, por lo que debieron restringir su venta.
Por otra parte, algunos chacareros neuquinos frenaron la salida de la fruta que existe en frío ante el temor a que los camiones no lleguen a destino. (Ver aparte)
El empresario de Roca, Carlos Pablo, distribuidor de marcas líderes de gaseosas, cervezas y aguas, explicó ayer que desde hace varios días no recibe los camiones que suelen llegar a diario desde Mendoza con mercadería y que pudo mantener la distribución gracias al stock con que cuenta. Los vehículos de reparto todavía salen a la calle, pero Pablo admitió que o se le termina la mercadería o se le acaba la reserva de gasoil. Lo que ocurra primero obligará a parar.
El empresario calificó la situación como "muy seria" y agregó que "ahora optamos por no cargar los camiones en Mendoza, porque no sirve de nada tenerlos cargados si no pueden salir hacia el Valle con la bebida".
El transporte público de Roca corre serios riesgos de reducir sus servicios si se mantiene esta situación. "Dependemos de la buena voluntad de las estaciones de servicio", aseguró Juan Castillo, uno de los directivos de la empresa 18 de Mayo, quien dijo que están afrontando a un costo mayor (entre 0,70 y 0,80 centavos) el precio del combustible que se compra a granel. Diariamente las unidades de la firma consumen unos 3.500 litros de gas oil y de mantenerse esta situación es probable que comiencen a reducir servicios. Es más, hoy el tema será analizado con las autoridades municipales.
"Estamos muy preocupados y creemos que esta situación va a empeorar", dijo el empresario.
No menos complicado se presenta el panorama para las empresas dedicadas a la venta de productos alimenticios. Por ejemplo desde Organización Comercial Don Tomás en Roca, aseguraron que resulta complicado ya que están operando con las cuentas corrientes de las estaciones de servicio, pero con las restricciones del mercado. "Ahora los choferes están obligados a cargar en la primera empresa que encuentran si van a Allen o Cipolletti", expresó Juan Carlos Maiolino, uno de los voceros.
Empleados de la empresa de colectivos Vía Bariloche aseguraron en Cipolletti que no tienen inconvenientes para cargar combustible en sus unidades. Explicaron que llenan los tanques en la base operativa que levantaron en Cipolletti, sobre la Ruta 22.
La realidad de otras empresas de colectivos es distinta. Firmas como Flecha Bus o AndesMar tienen convenios con estaciones de servicios de Neuquén o Allen. Esto implica que si las expendedoras están desabastecidas los colectivos no pueden cargar.
Ante consultas, la empresa de transporte Oro Negro en Cipolletti indicó que "están cargando con normalidad en una estación de servicios de Neuquén". Sin embargo otros transportistas dijeron que su actividad se vio afectada durante los últimos días ante la imposibilidad de cargar combustible. "Tenemos la mercadería en los galpones y no la podemos distribuir", aseguró un empleado.
Un hombre que se dedica a realizar fletes y mudanzas también manifestó que tuvo que desafectar dos camionetas por falta gasoil. (Redacción Central, AN, AR, AC, AVR y AA)
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